En la actualidad es muy fácil llegar a Cuernavaca a través de la carretera de cuota, en lo últimos años incluso se construyó un segundo piso para llegar más rápido a la caseta de cobro, pero quizás un día has pasado en la intersección de Insurgentes y Tlalpan has visto un monumento en honor a los trabajadores de la carretera federal a la capital de Morelos.
Se trata del Monumento al Caminero, obra de Joaquín Gutiérrez, ubicado en la intersección de la carretera federal (95) y la autopista a Cuernavaca (95D). Su construcción se realizó en reconocimiento de los trabajadores de estas dos importantes vialidades para Tlalpan y el DF, fue inaugurado en 1956 poco después de que se terminara de construir la nueva autopista.
El monumento se encuentra en medio de varios jardines y una vez llegando al punto se observa un conjunto escultórico en cantera de tres personas de gran altura que sostienen un martillo neumático, un teodolito (instrumento con diferentes usos en la topografía) y un libro. Al frente se encuentran 2 grandes placas con el siguiente texto: “Al caminero, integrador de las comunicaciones de México MCMXXV – MCMLVI” (1925 – 1956 la primer fecha hace alusión al año en que se terminó de construir la carretera federal y la segunda fecha alude al año en que se terminó la construcción de la súper carretera a Cuernavaca).
Actualmente, desde el monumento, puedes observar el avance que ha tenido la Ciudad de México con algunas de las vialidades elevadas. Enfrente del monumento puedes tomarte un helado o comer algo en algunos comercios que se encuentran enfrente, junto con dos hoteles que aunque han cambiado, han prevalecido en ese lugar por décadas.