El Colegio de San Ildefonso realiza un intenso programa de actividades literarias, editoriales y comunitarias como parte de la conmemoración de los 108 años del natalicio de Octavio Paz, que también contempla que las cenizas del Nobel mexicano, junto con las de su compañera en vida, Marie José Tramini, sean depositadas en el Memorial que para dicho fin se creó en el recinto.
Hasta el domingo 3 de abril se llevarán a cabo una serie de actividades en torno al poeta y su legado que llevará por nombre “Octavio Paz de vuelta a San Ildefonso”.
Con la apertura del Memorial Octavio Paz-Marie José Tramini se responde al acuerdo tomado en 2018 por la Universidad Nacional Autónoma de México, las Secretarías de Cultura federal y de la Ciudad de México y El Colegio Nacional de que las cenizas de Octavio Paz fueran depositadas en este lugar.
Octavio Paz ingresó a la Escuela Nacional Preparatoria, que entonces tenía su sede en el edificio de San Ildefonso, en 1930, a los 16 años, hecho que, según escribió años después, marcó su vida. Al edificio colonial, edificado por la orden de los jesuitas, Paz dedicó su poema “Nocturno de San Ildefonso”, en 1976, una exaltación de la nostalgia por los años estudiantiles, una crítica a las ilusiones perdidas y los sueños justicieros de la juventud, pero, sobre todo, un canto de amor a la Ciudad de México y a su Centro Histórico, así como a la historia del país y su tránsito en el siglo XX.